martes, 22 de septiembre de 2009

LOS PUEBLOS DEL SILENCIO - PERROS


Recurriendo al excelente libro de Elías Rubio “Burgos: Los Pueblos del Silencio”, iniciamos un recorrido por los pueblos abandonados que existen en la zona que nos ocupa en El Correo de las Matas (Edición digital).

En esta ocasión nos acercamos al pueblo abandonado que entre el Puerto de Carrales y Soncillo responde al nombre de Perros.


Restos encontrados en la zona nos hablan de la existencia de Perros en la época altomedieval. La existencia de un eremitorio rupestre así nos lo indica.

No existen datos fiables de población fija en Perros hasta mediados del siglo XVIII cuando se sabe habitaban el pueblo un total de 8 vecinos repartidos en dos casas. Todos eran labradores dedicados al trigo, la cebada, el centeno, las habas y el maíz junto al habitual ganado de la zona.

Ya en el siglo XX, en 1940 su censo se fijaba en 24 habitantes para pasar en 1950 a 9 habitantes.

Perros era el pueblo del NO. No tenían escuela, no tenían iglesia, no tenían cementerio y nunca tuvieron ni agua, ni luz, sólo la claridad de los candiles iluminó el pequeño pueblo.

Unicamente un pequeño camino de carros, hoy parcialmente desaparecido, unía a Perros con Villanueva de Carrales y con Munilla (verdadero centro de la actividad diaria de Perros) y con Crespos.



Tampoco disponían los perreros, gentilicio de los nacidos en Perros, de médico debiendo acudir a las consultas de Paradores o de Soncillo.

La falta de servicios y la guerra civil española aceleraron la despoblación de Perros que definitivamente fue abandonado en 1968.
Sus últimos habitantes fueron Vitorino Fuentes y su mujer que abandonaron el pueblo tras vivir más de 12 años en solitario. El incendio que devastó su casa hizo que abandonaran el pueblo para siempre.


En la actualidad restos de entre 7 a 9 casas luchan por mantenerse en pie en un paraje natural de gran belleza. Paredes de piedra pelean con gruesas raíces que intentan hacerse con todo el terreno.


Entre bosques de pinos, robles y otras especies viven entre árboles frutales que alimentaron a los antiguos pobladores del pequeño municipio. Cerezos, ciruelos, avellanos y manzanos que antaño dieron sus frutos para los habitantes de Perros los hacen ahora esperando a algún visitante perdido.


Abandonamos Perros con la impresión de entender su abandono pero con la pena de que nadie disfrute de un sorprendente y mágico lugar.

Fuente: Los Pueblos del Silencio de Elías Rubio
Video y Fotos: Andrés Serna 2009

4 comentarios:

  1. Andrés me tienes que enseñar ese pueblo ehhh, ya me hablaste de él en Lomas la pateada que te hicieron dar jejeje, fotos chulas...ésto va en aumento ehhh cada día más visitas...sigue así....besos...

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  2. CHAPEAU! Andres, ha merecido la pena la pateada, ahora tengo que ir yo, caramba...
    Gracias.
    Julio C.

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  3. Yo he estado en varias ocasiones en Perros, y escasamente quedan un par de paredes en pie. Hoy en dia se accede andando por que ya no queda ni camino, iba desde Munilla. Un sitio con el encanto de saber que un dia estuvo habitado y que hoy en dia unicamente recorre alguno de los ultimos lobos que habitan en la zona.

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  4. Munilla también estuvo con todas sus casa cerradas en invierno
    Sí que se conservaron y según me dijeron desde hace años volvieron los"jubilados " y el pueblo volvió a tener vida😀

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