viernes, 2 de septiembre de 2016

PRESILLAS DE BRICIA - ANCESTRO EREMÍTICO


Habitual en nuestro blog y en nuestro Facebook es que hablemos de las iglesias rupestres de nuestra zona, tanto de Cantabria, como de Burgos y Palencia, pero siempre con una especial dedicación a la Iglesia Rupestre de San Miguel de Presillas de Bricia (Alfoz de Bricia – Burgos).
Conocedores de nuestro modesto trabajo hace un par de meses recibimos la llamada de la dirección de la excepcional página web, Facebook y guías “Sur de Cantabria”. Querían quedar con nosotros en la rupestre de Presillas, territorio fronterizo de la provincia de Burgos pero hermano con Cantabria.
La idea, como en muchas de las excelentes fotos de Sur de Cantabria, era relacionar a una persona con un lugar y que apareciera en la contraportada del suplemento “Campoo y los Valles” que el periódico el Diario Montañés edita todos los domingos.
 De camino a Presillas hablamos de Valdeolea, de Valderredible y de los maravillosos eremitorios rupestres que han sobrevivido en nuestra zona. Pero al llegar al bosque, a los pies de la rupestre, les dije que últimamente, al atardecer, siempre que visitaba la rupestre de Presillas me encontraba a un monje eremita orando en la iglesia. Tuvimos suerte, nos encontramos al anacoreta que además nos permitió hacerle la foto que al final sería la contraportada del diario.
Seguro que la conversación que tuvimos con el Eremita inspiró a Luis Prieto para escribir el maravilloso texto y a Miguel de Arriba para tomar la excepcional y emocionante fotografía, que aquí compartimos.
Gracias por acordaros de El Correo de las Matas para la contraportada del periódico y por llevar aún más allá el mágico mundo de la iglesia rupestre de Presillas de Bricia.
El Eremita de la Iglesia Rupestre de Presillas de Bricia (Foto de Miguel de Arriba)
ASALTO A LA CUNA DE IBERIA
Ancestro eremítico
...es recogida, apartada, duradera: el alma de aquí
Cada muesca sobre la piedra, cada arañazo de la tosca herramienta y la mano agrietada, son una evidencia conmovedora. Gran parte de lo que somos se fraguó en estos espacios. El tiempo y el aire venteado que respiramos, ha dado formas de ‘capricho’ modernista a estas cuevas iniciáticas. Son lo que fueron, y lo que queramos que sean: escondrijos, esculturas, confabularios, habitáculos, altares, foros, refugios del ánimo, decorados cósmicos, o las mil formas del arte.
Los eremitas eran de todo: salteadores de caminos, rebeldes adelantados, iluminados, cristianos precursores, ascetas, chamanes, vendedores de crecepelo e incluso ancestrales alcaldes pedáneos.
 
Al habitante de este lado de la cordillera, al nacido y criado, le corre sangre eremita por las venas, genética imborrable. También conserva marcas de pastor cántabro, de comerciante romano, o de agricultor mesetario, entre otras muchas. Tierra invadida...
La cueva rupestre y la iglesia posterior es recogida, apartada, duradera: el alma de aquí. El hábito del eremita es breve y solo suyo.
Por tercera vez en esta contra, hablamos de la portentosa arquitectura rupestre que rebosa los viejos montes de los cántabros. Para este día, Andrés, singular y multicreativo bloguero de El Correo De Las Matas se calzó un hábito de su cosecha en la deslumbrante iglesia rupestre de San Miguel de Presillas (prima y vecina de la de San Acisclo y Santa Victoria de Arroyuelos). La tarde dio para confidencias históricas y descubiertas respetuosas. Miguel, urbanita confeso, retornó tocado.
TEXTO: LUIS PRIETO – Sur de Cantabria
FOTO: MIGUEL DE ARRIBA
Texto Intro: Andrés Serna.
IMAGEN CEDIDA POR FONDO SUR DE CANTABRIA DE LA SRECD DEL GOBIERNO DE CANTABRIA
Contraportada Suplemento Campoo de El Diario Montañes