sábado, 9 de mayo de 2020

PARADORES DE BRICIA, EL ÚLTIMO CAFÉ

No sé exactamente el día pero debió ser un viernes de noviembre del pasado año 2019.
Nada hacía suponer que aquel iba a ser nuestro último café en el bar de Paradores de Bricia (Alfoz de Bricia – Burgos).

Cerró uno de los lugares de mayor historia de los tiempos modernos en la vida de las personas del Alfoz de Bricia.
Por allí hemos pasado todos. Pasaron nuestros abuelos, pasaron nuestros padres y pasamos nosotros. Era la visita obligada antes de llegar a nuestros pueblos.
Siempre nos esperaron con las manos abiertas, Carmen en los viejos tiempos y Espe y su familia en nuestros días. Siempre tuvimos allí un café esperándonos, el único café…

El bar no pudo asumir un último cambio generacional. La despoblación de la zona lo fue matando poco a poco. Quizás la autovía de Reinosa fue la primera puntilla para el cierre. Cada vez menos gente subía el mítico puerto de El Escudo para ir a Burgos desde Santander.
Tampoco la administración ha facilitado las cosas. No se pueden pagar impuestos de ciudad en pueblos tan pequeños y olvidados. Además cada pueblo abrió, con mayor o menor acierto, su teleclub. Mientras los bares de antaño siguen pagando sus altas tasas de impuestos, estos nuevos centros no pagan nada. Una competencia claramente desleal.
Los bares de los pueblos pequeños son muy importantes. Seguramente muchos de ellos no son rentables pero definitivamente cumplen una función social necesaria en nuestra zona. Cada vez son menos las zonas donde reunirse, donde charlar, donde conocer las noticias de la zona. Además fijan población en una zona cada vez más vacía. 
El cierre del bar de Paradores duele más porque era toda una institución en nuestra zona, quizás uno de los bares más viejos del lugar. Parece como si se hubiese ido otro abuelo de nuestra zona. Muere otro poco con este cierre la gran memoria de nuestra zona.

 Y es que en aquel, ya mítico, bar de un pequeño rincón de Bricia hay mucha historia. Investiguemos…

Justo en la parte de atrás del edificio, al otro lado de la puerta de entrada todavía se puede ver un sillar que puede darnos muchas pistas. En ese sillar está grabada una inscripción que dice: “Año de 1848”.
Sillar con la posible fecha de la creación de la venta bar. Año de 1848
Quizás sea esta, sin duda, la fecha en la que abrieron nuestro bar, por lo que todavía tiene muchos más años de lo que pensábamos.

Si leemos a Madoz en el “Diccionario Geográfico Estadístico Histórico de España y sus Posesiones de Ultramar”, escrito entre los años 1845 y 1850, podemos encontrar que justo en esos momentos se estaba construyendo la actual carretera entre Santander y Burgos aprovechando las vías del antiguo Camino Real.

La fecha del sillar de Paradores (1848) cuadra con la creación de esta carretera por lo que podemos decir que, aunque las demás poblaciones de la zona ya existían mucho antes, Paradores nació a rebufo de la creación de esta vía de comunicación que hoy es la nacional 623.

Seguramente nuestro bar nació como venta. Un lugar quizás en un despoblado, pero en un  centro de comunicación importante entre pueblos. Muy cerca están los pueblos de Bricia, Barrio de Bricia, Cilleruelo de Bricia, Campino, Renedo de Bricia y Espinosa de Bricia, aunque estos últimos pertenecían a la provincia de Santander hoy comunidad autónoma de Cantabria.

Ya en el siglo XX, el bar de Paradores fue tienda de ultramarinos. En su entrada podía verse el cartel que decía: “Carnes, Vino, Cerveza, Ultramarinos”.
Gentes de los pueblos de la zona imaginamos podían comprar aquí latas de conserva, azúcar, vino, cerveza, arroz, salazones, embutidos, huevos, Café, achicoria y un largo etc.
Con el paso del tiempo y al ser una zona pobre en servicios, Paradores sirvió también de dentista. Cuantas muelas de vecinos de la zona fueran sacadas allí.
  

Importantísimo paso para nuestra zona fue cuando allí se puso uno de los primeros teléfonos del Alfoz de Bricia. Todavía recuerdo aquel cacharro, antes de llamar había que dar a una especie de carraca para poder coger línea. Es un recuerdo fijo para todos nosotros, todo el mundo recibió alegrías y penas en el que fue el primer teléfono para mucha gente.
Fotograma del corto documnetal Aupa Delibes
Por allí pasó todo el mundo y entre ellos uno de los literatos españoles más importantes de todos los tiempos: Miguel Delibes.

El Bar de Paradores era parada obligatoria del escritor en sus viajes en bicicleta para ver a su novia. El veraneaba en Molledo (Cantabria) y ella lo hacía en Sedano (Burgos). El ciclista Delibes paraba a coger fuerzas en el bar, donde le esperaban huevos fritos (de gallina de verdad).
Familia Delibes en el Bar de Paradores
Con el tiempo sus hijos, nietos y biznietos han recuperado esos kms y juntos, como si de una vuelta ciclista se tratara, se unen todos los años para recorrer los kms que hizo el abuelo.

Miguel recogió su pasión por la bici en “Mi Querida Bicicleta” (1988) donde nuestro bar adquiere protagonismo: ”Fuese para arriba o para abajo, el lugar de refrigerio era el estanco de Paradores de Bricia, en el páramo desolado, donde me servían un par de huevos fritos con chorizo, pan y vaso de vino por una peseta, diez”.


Así quedó plasmada la existencia del bar de Paradores en la obra del Gran Delibes.

Recientemente se estrenó un documental que narra las vivencias del Delibes deportista por nuestras tierras. Por supuesto el Bar de Paradores es protagonista en el breve documental “Aupa Delibes” (2015).

Pero el bar no fue solo un bar, es imposible no recordar cuantos favores hicieron a las gentes de la zona. Allí nos cogían el pan, las medicinas, el butano y los recados que la gente dejaba en su teléfono.

Esta ha sido la historia de una de las instituciones más antiguas de la zona. El bar que visitó todo el mundo durante décadas, nadie pasaba de largo, todos paraban. Cuantas partidas de cartas, cuantos encuentros entre personas, cuantas noticias, cuantos cigarros, cuantos favores nos hicieron en el bar de Paradores y sobretodo cuantos recuerdos…
Espe en la barra del bar. Fotograma sacado del documental "Aupa Delibes"
Fotos Antiguas: Familia Sieiro.
Fotos color: Andres Serna.
Foto Familia Delibes: Fundación Miguel Delibes
Otras fotos: Fotogramas tomados del documental "Aupa Delibes"